Erase una vez una princesa que tenía 26 años llamada Renata nació el 15 de abril de 1985 en la ciudad de Puebla, su cuarto tenia colores pastel y esto lo hacía mágico como extraído de un cuento de Walt Disney, le encanta estar con su familia pero principalmente con sus hermanas, ella es muy cariñosa con toda la gente, le gusta ir de compras y tener todo lo que desea, siempre anda muy arreglada como muñeca de porcelana y a todas las reuniones tiene que ir vestida y arreglada para que ilumine a todos los asistentes.
Es una princesa muy bonita tiene ojos cafés claros y tiernos, cabello castaño brilloso y ondulado, mide 1.50 y pesa 47 kg., es simpática, sencilla, es conocido por todos que ella es amante de los seres vivos, tiene un profundo sentido de humanismo y siempre busca ayudar al prójimo.
Tiene en mente y anhela ir a Veracruz para ayudar a las personas marginadas y de bajos recursos, apoyarlas y darles herramientas para que salgan adelante de una manera fácil y con algo que les guste hacer. Quien la guio por este camino del apoyo fue su padre quien siempre ha buscado apoyar e impulsar a la gente que lo necesita.
Su nombre es Anastasia, nació el 05 de marzo, tiene 26 años, es bonita, tiene facciones muy finas, un cabello negro hermoso como la noche y ojos azules y profundos como el cielo, mide 1.60 y pesa 58 kg.
Desde pequeña fue muy introvertida, pese a su belleza siempre parecía estar reprimida como si hubiera actuado mal, sus padres la obligaron a trabajar para mantener su casa y los vicios de ellos. Siendo mayor se refugió en un hombre que abuso de ella y la obligo a prostituirse, con el pasar del tiempo se le hizo costumbre y el ser una puta es su modo de vida, vender su cuerpo no es muy agradable para ella pero es para poder salir adelante económicamente ya que no cuenta con el apoyo de nadie, aparte es indiferente a estudiar o al querer superarse.
Renata hace un viaje a Veracruz llega a un pueblo casi fantasma, pero la poca gente que vive allí la recibe de la mejor manera, se empieza a relacionar con la población, platicando y haciendo planes para lograr desarrollarse
Durante una caminata en el pueblo al final de la calle principal mira a una mujer parada en la puerta de una casa de color rosa, aquel rosa que le recordaba cuando era pequeña, se acercó a la mujer, pues era la única persona que no había visto, le pregunto su nombre y por qué no había asistido a las reuniones a las que había convocado; con una voz suave y ronca por el consumo del tabaco Anastasia le contesto “Si no he asistido es por mi trabajo, no me puedo mover pues mis clientes no tienen un horario fijo”, Renata la miro con ojos de incertidumbre e inmediatamente Anastasia molesta y con voz gruesa le dijo “¡Si, soy puta y no me tienes que mirar así!”, Renata calmada le contesto “Tranquila yo no vengo a juzgar a nadie, simplemente vengo a conocerte y brindarte mi ayuda.”
Anastasia se calmó y comenzó a contarle cuáles eran sus sueños y expectativas sobre la vida, curiosamente ninguna incluía un cambio de trabajo o deseos por salir adelante.
Renata comenzó a enseñarle muchas cosas tanto educativas, de valores, a Anastasia y a la par ambas trataron de sacar adelante y apoyar a la comunidad, con el pasar del tiempo Anastasia decidió dejar de vender su cuerpo, busco nuevas formas junto con Renata de educar a los niños, dar trabajo a jóvenes y adultos y dar apoyo a los más viejos
Y es así como la puta y la princesa pese a sus grandes diferencias se unieron lograr una noble causa.
Sin importar quien seas y que hagas el amor y la fe te unen, cuando de apoyar se trata.
FIN
Resulta importante hacer la biografía para conocer a nuestros personajes y como actúan después, en el cuento. Pero aquí no me gusta la historia, en lo particular creo que es plana, el conflicto no está bien desarrollado y el final me deja pensando sobre si de verdad existe gente buena, o sí la "princesa" haría eso.
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